miércoles, 11 de marzo de 2015

GARROTE ESTRATÉGICO / 3.200 marines más en Perú reforzarán militarización estadounidense de América Latina y el Caribe


"Tenemos el ejército más fuerte del mundo y en ocasiones tenemos 
que torcer el brazo a los países
si no quieren hacer lo que queremos"

Barack Hussein Obama
Premio Nobel de la Paz

Por Vicky Peláez
El próximo arribo al Perú de 3.200 marines norteamericanos autorizado por el Congreso peruano alarmó a toda América Latina pues significa un renovado interés de Washington en hacer retornar a sus "hijos desviados" a su "patio trasero", o como mínimo mantenerlos subordinados y obedientes a la voluntad de la primera potencia del mundo. Es un paso adelante en la aplicación de la doctrina de la Militarización de la Hegemonía de los EEUU en Latinoamérica.

De acuerdo al reciente estudio de Heritage Foundation, "2015 Index of US Military Strengh" (25 de febrero 2015), el gobierno norteamericano se siente alarmando porque uno de sus "más fuertes adversarios, Rusia está logrando formar una asociación estratégica a través de la cooperación militar, venta de armamento, tratados comerciales e inclusive la participación en la lucha contra el narcotráfico" en Latinoamérica. Y lo está haciendo con "los países pertenecientes a la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA) cuyos miembros como Cuba, Ecuador, Nicaragua y Bolivia perciben EEUU como su oponente ideológico".

Pero lo que más que irrita a Washington es la posibilidad de aparición de bases militares rusas en Nicaragua, Cuba y Venezuela.

También le preocupa a la Casa Blanca que China, que es considerada como el país que representa "alta amenaza" para los intereses nacionales estadounidenses en la región, se está afianzando cada vez en el Hemisferio Occidental. Actualmente China está proponiendo invertir 40 mil millones de dólares para construir un nuevo canal interoceánico en Nicaragua que será un rival en perspectiva norteamericana al Canal de Panamá. A la vez las Fuerzas Armadas chinas están igual que las rusas cada vez más activas en la región y participan en las maniobras militares no solamente con los países del ALBA sino con Argentina.

Frente a esta situación el gobierno de Barack Obama decidió expandir su presencia militar en América Latina a través del aumento de las bases militares. Ahora no se trata de las grandes instalaciones para futuras invasiones convencionales sino el uso de bases pequeñas, llamadas "Lily Pad Bases" con una infraestructura que puede expandirse en el plazo, en términos operativos, muy corto. Actualmente Estados Unidos tiene alrededor de 74 bases militares en Latinoamérica y el Caribe. Según el periodista y politólogo argentino, Atilio Borón, "con 25 bases militares EEUU tiene rodeado militarmente a Brasil y con 13 a Venezuela para tener el control sobre la Amazonía y el petróleo bolivariano".

De acuerdo al historiador y periodista norteamericano Nick Turse, la Nueva Doctrina norteamericana para el Siglo XXI no está basada en invasiones y ocupaciones sino como él dice "piensen en las operaciones de las Fuerzas Especiales, destacamentos locales pronorteamericanos, militarización del espionaje y de los servicios de inteligencia, drones, ataques cibernéticos, operaciones conjuntas del Pentágono con las agencias civiles militarizadas". En otras palabras se trata de lo que el investigador del Instituto de Estudios Estratégicos de EEUU, Frank Hoffman definió como una "Guerra Híbrida".

Este tipo de "guerra" es una forma de "guerrilla que usa tecnología y métodos de movilización modernos". En su ensayo "Conflict in the XXI Century: the Rise of Hybrid War" (2007) Frank Hoffman habla también del uso de actos terroristas, asesinatos selectivos, coerción, secuestros, sabotaje, uso de bombas caceras y al mismo tiempo de los misiles más sofisticados. Afirma Hoffman que la "actividad criminal será usada para sostener la fuerza híbrida o para facilitar del desorden y el caos en la nación atacada".

La Guerra Híbrida se basa significativamente en la explotación de los medios de comunicación para "llegar a las masas y movilizar su apoyo a la causa…aprendiendo a maniobrar contra la mente tanto de nuestros oponentes como de la población en general". El luchador híbrido en esta definición es un "camaleón" que se adapta a todo. Actualmente los intentos de este tipo de guerra son claramente visibles en Venezuela. Anteriormente los golpes de Estado en pleno Siglo XXI en Venezuela (2002), Haití (2004), Honduras (2009), Bolivia (2010), Ecuador (2011) y Paraguay (2012) que lograron su objetivo sólo en Haití, Honduras y Paraguay habían sido utilizados como laboratorios para la "Guerra Híbrida". También los recientes asesinatos de Nissman en Argentina o Nemtsov en Rusia fueron tanteos "híbridos" para evaluar la reacción de la población y el poder convocatorio y del convencimiento de la oposición y su disposición a empezar una "revolución de color" o un "Maidán" ya no ucraniano.

Lo nuevo en esta guerra proyectada en América Latina hacia los países del ALBA consiste en la concentración del poder no en las manos de la CIA sino en las del Servicio Clandestino Militar (SCM) y de las Fuerzas de las Operaciones Especiales (SOF) de EEUU Actualmente en el SCM unos 2.725 agentes reciben un bono especial por el conocimiento del español. En todas las 74 bases militares estadounidenses en Latinoamérica están presentes los militares de las SOF. En la región hay cuatro Oficinas de Enlace de Operaciones Especiales (SOLO) ubicadas en los países considerados por el Pentágono como claves en América Latina para los intereses nacionales de EEUU del dominio que son Brasil (Amazonía), El Salvador (El Caribe), Colombia (Venezuela) y Perú (los Andes).

Ahora el Pentágono prefiere la creación de las pequeñas bases militares clandestinas dejando de lado grandes instalaciones militares. Hace poco era del conocimiento público que en Perú habían tres bases militares norteamericanas en Iquitos, Nanay y en Santa Lucía pero de acuerdo al politólogo y periodista argentino, Atilio Borón hay seis bases más que son clandestinas. El pretexto para su existencia y arribo de nuevas tropas norteamericanas sigue el mismo: la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico. Igual lo estaba haciendo EEUU desde décadas en México.

Su resultado fue la militarización del país, aumento de la violencia sangrienta, exterminio de líderes sindicales y el aumento desmedido del narcotráfico a pesar de que en México están operando 25.000 agentes estadounidenses de 17 servicios de inteligencia. Finalmente, se hizo público que la Administración para Lucha Contra Drogas (DEA), junto con la CIA y la Agencia de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego (ATF) norteamericanas suministraban armas y permitían al cartel de Sinaloa hacer el 80 por ciento de envíos de droga a Norteamérica a cambio de la información sobre otros carteles.

En el caso del Perú que es un productor de coca, la DEA, que tiene su sede regional en el país, y todas las instituciones nacionales dedicadas a la lucha contra el narcotráfico jamás pudieron terminar con este próspero negocio. Se calcula que, según la entrevista que hizo el periodista norteamericano Dave Hodges de "The Common Sense Show" a un agente de la DEA, Perú produce alrededor de 325 toneladas métricas de cocaína pura al año de los cuales no más que el cinco por ciento interceptan la DEA y sus colegas peruanos. El precio de un kilo de cocaína en New York es entre 20.000 a 30.000 dólares, lo que significa que la ganancia es alrededor de 9.000 millones de dólares al año.
Precisamente este dinero corrompe todo a su alrededor, incluyendo a la DEA, la CIA y ahora posiblemente lo hará con la DIA (la Agencia de Inteligencia Militar) de EEUU pues la tentativa sería muy grande. Los marines militares estarán en la base en VRAE en la zona de los valles Apurímac y Ene donde operan los narcotraficantes a los que los medios de comunicación están presentando como subversivos del Sendero Luminoso, organización que fue destruida durante el gobierno de Alberto Fujimori. Así se ha creado pretexto para la participación norteamericana en la lucha contra el terrorismo y narcotráfico en Perú lo que requiere la construcción de bases militares.

Siendo Perú uno de los aliados más incondicionales de EEUU, surge sospecha que a la larga el país que posee inmensas riquezas naturales, siendo inclusive el segundo en el mundo por las reservas de oro, tomaría el camino de México con todas sus consecuencias. Por algo el mandatario de EEUU Barack Obama dijo recientemente que el Perú se ha convertido en la envidia del mundo por su sobresaliente crecimiento económico y que es un aliado leal de Estados Unidos. Hace más de 20 años Bill Clinton dirigía las mismas palabras a México, y ahora este país es un simple títere de Washington entregando su riqueza natural al Gran Patrón a precio de ganga e inclusive ofreciendo una "yapa" (aumento).

El mismo rumbo podría tomar el Perú, todo dependerá de la madurez y conciencia de su pueblo, por lo pronto, ya se produjo hace unos días una protesta frente al Congreso que aprobó la llegada de los soldados norteamericanos. Entonces como recitaba Rubén Blades en una de sus canciones: "Cuidado no te dejes confundir, busca el fondo y su razón/ Recuerda se ven las caras pero nunca el corazón".


7 acciones que tomará EEUU para justificar ataque contra Venezuela

Por Carlos Santa María



La reciente declaración del presidente Barak Obama señalando a Venezuela como una amenaza extrema e inusual posee dos sustentos que débilmente permiten un análisis racional por la extrañeza de la afirmación. Más bien, es factible comprenderla a partir de reacciones emocionales (preocupantes por cierto), que escapan al marco regulatorio de la diplomacia y las prácticas de respeto en el campo social, humano y político.
La primera base es el Excepcionalismo, doctrina fundamental del Gobierno estadounidense y atado a su cultura intrínseca, según la cual esta nación tiene un destino manifiesto que la obliga a ejercer el control y supervisión del mundo, para que se desarrolle acorde con sus propios criterios de lo que significa justicia y libertad. Dios los ha destinado a ser el pueblo elegido y ello implica que tiene el derecho a aplicar todas las herramientas terrenales para obligar a seguir su camino, obviamente torciendo el cuello o el brazo, a quien no acepte el discurso 'divino'.
Esta concepción, comprendida dentro de los cánones de la siquiatría por su evidente desconexión con la realidad, implica que la injerencia es uno de los principales instrumentos, poderoso y legal, que lo autoriza a invadir pueblos y naciones.
La segunda base es su concepción de justicia, ligada a lo anterior, según la cual el Estado debe prevenir, curar o paliar todas las acciones internas y extranjeras que pudiesen afectar su estabilidad como país-potencia, estableciendo una legislación que interpreta lo correcto a partir de la mirada de las élites: todo aquello que atente a la propiedad debe ser condenado fuertemente por cuya razón la corrupción, por ejemplo, está en segundo lugar pues no afecta al paradigma mencionado. El orden es un pilar esencial, de allí que toda manifestación o voz deba ser silenciada por medio de la persuasión física, armada o psicológica, amparada en la legalidad. La tortura es aprobada sin dilación.
Por tanto, las verdaderas amenazas proceden de su forma agresiva de proceder frente a las voces o pueblos que consideren que su libertad está en riesgo y, como el mito de la caverna de Platón modificado, al ver la luz deberían ser cegados por la muerte, el golpe o las ataduras. Salirse de su eje significa una amenaza a la supervivencia pues el éxito se fundamenta en la expoliación.
¿Qué se pretende con Venezuela?
Hay que ser analíticamente profundo pues no es una simple advertencia sino que confirma que aún se sienten dueños de América del Norte, Centro y Sur, es decir, de todo un continente, corroborando la concepción entregada al comienzo.
Lo que inquieta a las democracias del planeta es que sus propias normas le facilitan una política de sanciones, destinada no únicamente a individuos vinculados al Gobierno, sino ya contra un Estado considerado contradictor. No obstante, cuando se ha solicitado justificar los procedimientos, la superficialidad es asombrosa. Según algunos funcionarios que prefieren permanecer anónimos para no ser sancionados también, esta orden ejecutiva "ayudará a proteger el sistema financiero de Estados Unidos de los flujos financieros ilícitos de la corrupción pública en Venezuela", como lo manifiesta BBC Mundo. Otros no pudieron explicar de qué manera esos señalamientos impactan la seguridad nacional estadounidense. En tanto, los siete funcionarios castigados pertenecen al aparato de seguridad del Estado venezolano, se les impide la entrada a EE.UU. (aunque no les interese), y tienen cerradas sus cuentas (aunque no las posean), ya que Washington los responsabiliza de lo que considera excesos represivos de las manifestaciones (febrero 2014), cuyo resultado fueron 43 muertos, muchos de ellos gobiernistas, y cientos de lesionados.
Lo que se intenta desde la Casa Roja (ex Casa Blanca) es enviar varios mensajes, entre ellos, primero, que los dueños de este planeta por destino manifiesto son ellos y nadie puede oponerse ni racional ni irracionalmente; segundo, que su poder procede desde el Cósmico como un mandato sagrado por lo cual están obligados a usar la espada cuando el mensaje no sea aceptado sin dilación; tres, que solo se retrocede cuando es imperioso aunque el mandato es dar la batalla hasta lograr convencer o eliminar al contrario; cuarto, que lo conveniente al opositor es entregarse mansamente al dictado divino que ellos encarnan, permitiendo que sus colaboradores (los supuestos verdaderos patriotas, pues su mente está en el norte y no en Latinoamérica) privaticen toda la nación para favorecer a los fieles religiosos que los acompañen.
Las peligrosas medidas en acción
Ante ello, es urgente dejar en claro las acciones que tomará el Gobierno de Obama con el fin de justificar su ataque continuado a Venezuela, proyecto que lo ha desarrollado incansablemente también en otros continentes y contra países que sufren sus embates actualmente.
1. Bandera falsa: crear un conflicto real a través de un autoatentado con el fin de justificar el asesinato de latinoamericanos e intervenir Venezuela. Este podría ser un ataque a una embajada, funcionario, ciudadano estadounidense, por ejemplo, en cuya táctica hay muchísima experiencia acumulada.
2. Incrementar su ayuda militar y económica a la oposición a través de ciudadanos venezolanos interesados en devolver las riquezas del país a manos extranjeras, empleando organizaciones espurias.
3. Insistir en el ocultamiento de víveres y medicinas, fomentando el contrabando, con el fin de incrementar las dificultades que existen objetivamente en esos campos.
4. Bloqueo económico a través de sanciones directas o indirectas que logren debilitar la infraestructura nacional, cuyo paso más fuerte fue dado a través de la baja artificial del precio en el petróleo.
5. Campaña mediática interna y mundial con el fin de imprimir en la opinión pública las categorías de crisis insalvable, falta de autoridad, represión a la oposición, corrupción, con el fin de incentivar 'La Salida' por fuera de las elecciones.
6. Fortalecimiento de las derechas existentes en todos los países latinoamericanos, como se ha estado viendo con la visita de Piñera, Calderón, Pastrana (todos afectos a Augusto Pinochet), a los golpistas y responsables de tragedias en el país.
7. Insistir en el uso de las agencias de inteligencia de carácter secreto o reservado para desestabilizar por otros mecanismos. Especialmente se recurrirá a aquellos venezolanos que vendan su nacionalidad o patria por denarios extranjeros, utilizándolos para propiciar la violencia y el aumento de sus índices.
Todas las medidas enumeradas están actualmente vigentes en tanto son parte de un proyecto 'evangelizador' y, por dicha razón, supuestamente justificado.
Conclusión
Esta declaración de 'emergencia nacional' es una herramienta para aplicar sanciones contra un país en determinadas situaciones y que le permite al presidente de Estados Unidos ir más allá de lo que se haya aprobado en el Congreso incluso posibilitando el 'Caos controlado'.
Sin embargo, lo que debe provocar temor para el Gobierno estadounidense es su propia dirigencia que les ha impedido comprender la realidad mundial y que ahora tiene al país cada vez más solitario y en conflictos prácticamente en casi todo el mundo. Desafortunadamente para una potencia que podría aportar tanto a la paz y el desarrollo mundial, la percepción de la mayoría de países sobre este es negativa, vinculándolo incluso al terrorismo mundial.
La recomendación racional y humanizadora al mandatario Obama es que recupere la credibilidad a través de una política inteligente asociando la justeza a la defensa de los afroamericanos tan agredidos y asesinados, a los latinoamericanos que constituyen una importante fuerza laboral para la marcha industrial, a los sistemas de salud y educación privatizados en extremo dejando a millones a la intemperie, concentrando sus esfuerzos en resolver la difícil situación interna de emisión volátil de dinero sin respaldo que provocará una crisis impensable, en fin, promover la verdadera equidad en todos los escenarios donde pueda ejercer su actuación.
Se considera que, al exponer públicamente las acciones encubiertas que se pretenden, es factible que la intervención militar directa ya no sea posible por obra de la sorpresa, aunque el magnicidio sigue siendo una opción no descartada. De igual modo, debe preocupar sobremanera a los ideólogos estadounidenses que cada afirmación que proveen como verdad es exactamente lo contrario: no es Rusia la que se está aislando sino su propia nación y el incremento económico producto de nuevos convenios es erróneo pues está disminuyendo gravemente. La división de la Unión Europea ante temas sensibles como Ucrania u otros parece indicar que el debilitamiento es global. El otoño de este patriarca injusto comienza a perfilarse con mayor nitidez en la medida que no regrese a la arquitectura valórica fundada en la Equicracia: la soledad en que han quedado sus medidas, sin que nadie apruebe estas en el mundo, indican que el proceso reflexivo es su único camino para enderezar su concepción ideológica.
Lo que sí es veraz es que el cambio en Estados Unidos, pueblo al que muchos consideran hermano en Latinoamérica y el Caribe, demorará algún tiempo más pues es preciso un proceso de liberación de las ataduras en la conciencia y en la movilización, lo que conllevará una victimización alta. La esperanza es que el golpe suave en el interior no se podrá promover pues quienes lo inventaron… a sí mismos no se lo provocarán.
Finalmente aquí cabe con exactitud la letra de León Gieco quien en 1978, ante las dictaduras, conflictos bélicos y el exilio de Mercedes Sosa, escribió: "Solo le pido a Dios que lo injusto no me sea indiferente, que la guerra no me sea indiferente, es un monstruo grande y pisa fuerte toda la pobre inocencia de la gente, si un traidor puede más que unos cuantos que esos cuantos no lo olviden fácilmente". 
http://actualidad.rt.com/opinion/carlos-santa-maria/168701-excepcionalismo-e-injusticia-verdaderas-amenazas
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