viernes, 25 de mayo de 2018

En Colombia, Petro anda bien en las encuestas y en riesgo de ser asesinado

Aunque con otro estilo, Gustavo Petro puede ser considerado el segundo Gaitán, por su extendido liderazgo y la densidad de sus planteamientos. Jorge Eliécer Gaitàn fue asesinado en Bogotá el 9 de abril de 1948, cuando despuntaba como líder del Partido Liberal de gran arrastre popular y compromiso de cambio a favor de las mayorías empobrecidas por el predominio de las oligarquías.
MANUEL ISIDRO MOLINA 
La oligarquía mafiosa colombiana no se anda por las ramas: cuando de asesinar candidatos presidenciales opuestos al estatus de control liberal-conservador ("la derecha" histórica de allá) se trata, pues salen y los tirotean con sus sicarios a sueldo. Así ha sido, y pudiera ocurrir durante las próximas semanas con el ex alcalde de Bogotá y senador Gustavo Petro, candidato el movimiento Colombia Humana.

Su riesgo es cada vez mayor, pues en todas las encuestas para la primera vuelta electoral del domingo 27 de mayo, aparece como segundo favorito: "Si las encuestas no yerran, se medirá en un balotaje el 17 de junio con el derechista Iván Duque, apadrinado del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010)", según escribe la periodista Marcela Rodríguez en reportaje de la agencia AFP publicado en el diario El Espectador https://bit.ly/2IR1IPG ).

Manuel Díaz, un partidario de Petro, lo refleja en su cuenta de Facebook-El Espectador con este encabezamiento: "Entérese por qué la mayoría de colombianos no queremos más de lo mismo".

Su enumeración histórica es no solo interesante sino estremecedora:

"1º   En Colombia han sido elegido 114 presidentes. Todos liberales o conservadores.

"2º       En nuestro país no se ha elegido un presidente de izquierda porque a quienes se lanzaron como candidatos presidenciales, los mandaron matar. Entre ellos:

"Jorge Eliecer Gaitán, 9 de abril de 1948

"Jaime Pardo Leal, 2 de octubre de 1987

"Luis Carlos Galán S., 18 de agosto de 1989

"Bernardo Jaramillo, 22 de marzo de 1990

"Carlos Pizarro Leóngómez,  26 de abril  de 1990  
 
"Manuel Cepeda Vargas, 9 de agosto de 1994 

"Todo por pensar diferente, por creer que los pobres tienen el derecho de vivir con dignidad.

"3º     Los homicidios, masacres y violaciones más crueles del mundo, fueron ordenadas por ellos o por causa de sus malos gobiernos. Les recuerdo algunos:

"3.1      'Guerra de los mil días'. Octubre 17 de 1899 al 21 de noviembre de 1902. Gobierno conservador de Manuel Antonio Sanclemente.

"3.2         'Masacre de las bananeras', entre el 5 y 6 de diciembre de 1928. Solo necesitaron dos días para asesinar a 1.800 humildes trabajadores y dejas 100 heridos. Gobierno liberal de Miguel Abadía Méndez, quien dio la orden de actuar en favor de la empresa de EE. UU. United Fruit Company.

"3.3       'El Bogotazo', 19 de abril de 1948. Gobierno conservador de Mariano Ospina Pérez. Un sicario a sueldo había dado muerte a Jorge Eliecer Gaitán. Primer candidato presidencial de izquierda. Ahí se inició la cruel guerra que han venido sosteniendo 26 gobiernos, hasta nuestros días. Hoy en proceso de paz.

"Todos estos mandatarios, han sostenido una 'democracia' a fuerza de asesinatos, violencia, homicidios, violaciones, masacres y desplazamientos, a través de muchas operaciones encubiertas... Sin contar los falsos positivos y la macabra idea de Uribe Vélez con las Convivir, que luego las denominarían como AUTODEFENSAS que apoyadas por el ejercito descuartizaron a machete y motosierra".

Logro "inimaginable"

El cuadro político de Colombia, con siete bases militares estadounidenses para el monitoreo y control de Suramérica por parte del "Comando Sur" del Ejército más poderoso del mundo, sufre cambios vertiginosos que todavía no son apreciados en toda su potencialidad. La guerra con las FARC va quedando atrás, pero la matanza de ex guerrilleros y líderes obreros, sociales y campesinos sigue siendo una constante, como ocurrió grotesca e impunemente con miles de dirigentes de la Unión Patriótica (UP):

"Dos candidatos presidenciales, los abogados Jaime Pardo Leal y Bernardo Jaramillo Ossa, 8 congresistas, 13 diputados, 70 concejales, 11 alcaldes y alrededor de 3500 de sus militantes (otras fuentes aseguran que fueron unos 5000) fueron sometidos a exterminio físico y sistemático por grupos paramilitares, miembros de las fuerzas de seguridad del Estado (ejército, policía secreta, inteligencia y policía regular) y narcotraficantes;2​ los sobrevivientes al exterminio abandonaron el país.3​ Estos asesinatos de los miembros de la UP en los años 80´s y 90´sfueron declarados en 2014 por la Fiscalía General de la Nación como delitos de lesa humanidad, al concluir que se trató de un plan por parte de sectores políticos tradicionales, en alianza con agentes de seguridad del Estado, narcotraficantes y paramilitares, para impedir el ascenso de movimientos de izquierda en la política colombiana". https://bit.ly/2J2XOXd 

Como lo escribió Marcela Rodríguez, "Petro ha conseguido lo que parecía inimaginable: que la izquierda llegara a una elección con opciones de gobernar a este país de 49 millones de habitantes y aliado tradicional de Estados Unidos".

La diferencia entre Duque y Petro
Esta primera vuelta del domingo 27, está capitaneada en términos de liderazgo por Gustavo Petro frente a los ex presidente Álvaro Uribe Vélez -uno de los más asesinos y mafiosos gobernantes colombianos-, senador y jefe de la mayor fuerza derechista colombiana hoy; y Andrés Pastrana, un conservador de capa caída, firmante de los acuerdos con EEUU para el establecimiento de las siete bases militares del Comando Sur; quienes hicieron un pacto político para el control del poder, y son los verdaderos jefes de Iván Duque, candidato del uribismo rabioso y pendenciero. Al presidente saliente Juan Manuel Santos no le queda otra, que sumar agua a ese molino para la segunda vuelta del 17 de junio próximo, por lo que Petro y sus apoyantes se enfrentarán a un reto extraordinario, un duelo nunca visto en Colombia.

"¿Crónica de una muerte anunciada?"

La eventualidad del asesinato de Gustavo Petro no es algo superfluo, producto de alarmismo o amarillismo periodístico. Ya el viernes 2 de marzo pasado en Cúcuta, reino del paramiliaterismo uribista, ocurrió una primera señal:

La caravana de Petro, entrando al parque Santander fue atacada durante una rara emboscada en la que habrían participado la policía local y activistas contrarios a su candidatura presidencial que en grupo mínimo trataron de provocar una trifulca con más de dos mil manifestantes de la campaña de Colombia Humana, como lo recogió entre muchos otros medios colombiainforma.info ( https://bit.ly/2xfjB9k ). 

El blindaje de la camioneta en la que se desplazaba Petro, impidió un posible magnicidio: "las balas no atravesaron los vidrios". Pero, el hecho fue banalizado y quedó en el camino de la campaña como un ligero ataque con piedras de algunos exaltados oponentes del uribismo cucuteño, cuyo control mafioso del narcotráfico, la "parapolítica", el lavado de dinero y el contrabando desde Venezuela es suficientemente conocido, tanto como el grado de impunidad que se le ha garantizado.

Desde acá, la convulsa y agobiada Venezuela, observamos que Colombia está demasiado tranquila hacia la primera vuelta del 27.05.2018, pero sabemos que la procesión va por dentro. Su mafiosa oligarquía está bien montada y decidida a acabar con la euforia popular que ha cosechado Gustavo Petro, quien dicho por todos "ha llenado todas las plaza" a lo largo y ancho del país. El riesgo es alto: a la colombiana, los votos son la máscara, algo más formal que real con cerca del 70 por ciento de abstención en comicios presidenciales, recurrentemente las balas asesinas hacen la realidad. 
Caracas, 25.05.2018