miércoles, 27 de febrero de 2019

THIERRY MEYSSAN / "Cuando EEUU lo desee va a comenzar la guerra en Venezuela"


Dividir el mundo en dos zonas: una estable para sus aliados y otra inmersa en el caos de una guerra sin fin. Parece algo absurdo, pero esa es la estrategia de EE.UU. para dominar el mundo, según opina Thierry Meyssan, periodista y activista político francés. Y ahora le toca el turno a Venezuela: "La situación ya está lista, cuando EE.UU. lo desee va a comenzar la guerra", advierte el analista. ¿Pero se puede resistir en esta situación? La respuesta es sí. Lo cuenta en Entrevista, de RT.
https://actualidad.rt.com/programas/entrevista/239088-eeuu-guerra-venezuela-thierry-meyssan-siria


Thierry Meyssan argumenta en esta entrevista su particular lectura geopolítica de las actuales tensiones en Venezuela, aportando datos históricos recientes que apoyan su tesis: Estados Unidos está intentando sembrar el caos en el país, por la vía de incentivar la oposición al gobierno y, en última instancia, una guerra civil. 
En el 2004 varios expertos del Pentágono explicaron que, en lo sucesivo, EE.UU. iba a librar guerras para dividir el mundo en dos zonas
Para entender las raíces y el sentido estratégico global del momento, este analista se remonta a principios de este siglo: "En el 2004 varios expertos del Pentágono explicaron que, en lo sucesivo, EE.UU. iba a librar guerras para dividir el mundo en dos zonas. Parecía una metodología muy rara, pero consistía en mantener una zona estable para EE.UU. y sus aliados e incluso algunos enemigos como China, Rusia y la India…y otra zona donde no hubiera gobierno estable ni desarrollo, sino el caos. Cuando escribieron eso, no se sabía hacia donde iban. Explicaban que querían garantizar que ningún estado pudiera ser una amenaza para EE.UU, que nadie pudiera desarrollar un poderío que amenazara su hegemonía mundial. Incluso publicaron un mapa donde se veía que había que destruir todo el Medio Oriente"

Reuters
En cuanto a América Latina -precisa Meyssan- explicaron que sólo Brasil, Argentina y México debían ser Estados estables…y el resto debía ser destruido"
Cuando EE.UU. lo desee, va a comenzar la guerra aquí, en Venezuela
Pero, ¿por qué precisamente ahora? Hemos querido saber qué tiene de particular este momento político para resultar idóneo para una supuesta intervención de este tipo. La respuesta de Meyssan no es demasiado precisa al respecto, pero su intuición no le anuncia nada bueno: "No sé por qué generan esas acciones ahora, pero está claro que EE.UU. hace que la situación hierva poco a poco. Cuando vengo acá, me doy cuenta de que la situación ya está lista, que cuando EE.UU. lo desee, va a comenzar la guerra aquí, en Venezuela".

Carlos Barria / Reuters

Antecedentes históricos de la 'guerra de perros'

Meyssan considera, como puede verse, que Estados Unidos opera en el exterior mediante una estrategia militar destructiva que funciona en base a un mecanismo de desestabilización interna en los países considerados enemigos. Y encuentra ejemplos en la historia reciente que ejemplifican ese particular modus operandi: "Cuando estudiamos lo que pasó en Ucrania, en Siria o en Libia, es exactamente la misma metodología; siempre comienza exactamente igual: se acusa al gobierno de cometer crímenes horribles (…) luego envían al país unas fuerzas especiales, unos francotiradores, que se colocan en los techos durante una manifestación, con el objetivo de disparar tanto contra los manifestantes como contra la policía (…). Eso crea una confusión enorme, y cada bando está convencido de que  fue el otro el que le disparó, y ese es el comienzo de un enfrentamiento interno".
Ese método fue utilizado por primera vez en Yugoslavia. Allí lograron provocar una guerra civil que partió ese país en 7 pedazos
"Ese método [conocido popularmente como 'guerra de perros'] fue utilizado por primera vez en Yugoslavia –continúa narrando Meyssan–. Allí lograron provocar una guerra civil que partió ese país en 7 pedazos".
A continuación, este periodista y activista político, explica con detalle el resto del proceso al que se somete a los gobiernos 'atacados': "Una vez que hacen esto,comienzan a acusar al gobierno de las muertes, y lo hacen ante la comisión de Derechos Humanos de Ginebra. Ese Consejo se transforma rápidamente en un tribunal de acusación, que milagrosamente consigue varios testigos que vienen a dar su testimonio… pero son falsos testigos. Eso es muy fácil de conseguir: falsos testigos. Sus testimonios se avalan y se envía esa información  al Consejo de Seguridad [de la ONU], que queda horrorizado y autoriza el uso de la fuerza contra ese 'terrible gobierno que acaba de matar a su población'. Simultáneamente se envían al país una fuerzas especiales que atacan símbolos del estado". En Siria, por ejemplo, atacaron estatuas del presidente Háfez Al Assad, que es el padre de la Siria moderna".

Alaa Faqir / Reuters
Extrapolando la explicación al presente momento crítico en Venezuela, hace su propia predicción: "Aquí me imagino que atacarán estatuas de Hugo Chavez, quemarán la bandera…elementos que no tienen valor militar". Se trata, según comenta el propio Meyssan, de una "guerra simbólica".Y concluye: "Entonces se utilizan los medios internacionales para explicar que es una revolución". 

Bases militares cerca de Venezuela

Están previstas para el próximo mes de noviembre unas maniobras militares militares en la triple frontera de Perú, Colombia y Brasil, con el apoyo de EE.UU., a tan solo 700 kilómetros de la frontera Venezuela.
No lo hace porque son lindos los colombianos: lo hace porque está preparando un ataque contra Venezuela
"Para llevar a cabo operaciones militares como éstas –comenta Meyssan al hilo de su propia tesis de la desestabilización interna–, EE.UU. necesita rodear al país que van a atacar o al menos tener una base militar en la frontera del país. En Libia utilizaron a Egipto; en el caso de Siria, utilizaron casi todos los estados aledaños: Turquía, Líbano, Irak y Jordania…no estaban en Israel oficialmente… pero Israel también. Si van a atacar a Venezuela, sin duda van a utilizar a un estado o a varios estados fronterizos de Venezuela. Sin duda los estados mencionados, pero también Guyana, que también puede servir como base importante para generar el desorden". También se refirió a las bases militares estadounidenses en Colombia, indicando que si EEUU las mantiene allí "no lo hace porque son lindos los colombianos: lo hace porque está preparando un ataque contra Venezuela". 


'Fake News' y videos falsos

Para ilustrar la dimensión informativa en la estrategia estadounidense, Meyssan se remonta a la invasión de Libia: "Cuando EEUU atacó al gobierno libio, el ataque ocurrió un viernes a la hora de la salida de la oración, a las 19:30 de la tarde. Así, a las 23:00 de la noche, 'Skynews', que tiene también una programación en árabe, envióimágenes donde se veían rebeldes en la Plaza  Verde, en el corazón de Tripoli. En ese momento era imposible salir a la calle, porque había muchos bombardeos; nadie podía circular en vehículo por la ciudad. Entonces…¿cómo podrían llegar allí?Cuando vi esas imágenes me dije: todo está perdido. Yo estaba a varios centenares de metros de esa Plaza Verde, pero me di cuenta de que todo eso era mentira. Los mercenarios (algunos de los cuales eran libios, pero muy pocos) llegaron a la Plaza Verde 3 días y medio después. Pero las imágenes ya estaban disponibles porque fueron filmadas en estudios al aire libre en Qatar.
Con respecto Venezuela, Meyssan dice: "Imagínese cuales serían aquí las consecuencias si de repente vieran por televisión que hay enemigos que están llegando al centro de Caracas y se les dijera que…bueno, que se perdió la guerra...".

Carlos Barria / Reuters
Hacia el final de la entrevista, cuyo visionado completo les recomendamos encarecidamente, este analista comparte con nosotros sus predicciones sobre el proceso que está teniendo lugar en suelo venezolano, en especial sobre la oposición: "Todas estas oposiciones están cometiendo un error. Los movimientos opositores, ya sea aquí en Venezuela como en el mundo árabe, serán todos destruidos, tal y como habrán permitido la destrucción de los gobiernos a los que se oponen. PorqueEstados Unidos se burla de ellos más que de los gobiernos".

lunes, 18 de febrero de 2019

PASANDO LA HOJA / ¿Por qué defiendo la paz?

El almirante Craig S. Faller, jefe del Comando Sur de Estados Unidos, durante una visita con sus homólogos brasileños en Río de Janiero CreditErnesto Londoño/The New York Times


Manuel Isidro Molina

A los tambores de la guerra hay que responder con cantos por la paz y la solidaridad. Venezuela lo merece y nuestro maltratado pueblo lo necesita con urgencia, para impedir el holocausto que sería una invasión colombo-estadounidense como la que ha planeado el Comando Sur del Ejército de Estados Unidos contra nuestro país, bajo el mando de Donald Trump, jefe de una patota internacional que pretende convertir a la patria del Libertador Simón Bolívar en un protectorado gringo.

Impedir la destrucción de la guerra es prioritario. Sus descocados  promotores -que desde Venezuela claman por esa intervención militar neocolonial- no imaginan el peso de la historia que caerá sobre sus magras reputaciones de vendepatrias;  y sus aplaudidores -inducidos por una campaña bien orquestada a favor de los invasores- desconocen las terribles consecuencias de la guerra: les han hecho creer que se trataría de un videojuego o de una "operación quirúrgica" como la que tantas veces ha promovido la filmografía estadounidense, en la que "'los buenos' siempre ganan".

El camino de la paz
Las primeras víctimas de la guerra son la verdad, el derecho y los buenos modales: la destrucción y la muerte sanguinaria se vuelcan sobre el "teatro de operaciones" y sus poblaciones. En nuestro caso, abarcaría espacios de Venezuela y Colombia, inicialmente, como el señuelo de la "ayuda humanitaria" lo indica desde Cúcuta, principal centro de operaciones ofensivas hacia la zona fronteriza venezolana del estado Táchira. 

Colombia ha sido convertida en un portaaviones terrestre de EEUU. Así lo han querido los gobernantes de la oligarquía mafiosa que domina al vecino país -hermano historicamente-, enervado por las bandas del narcotráfico, la corrupción y el asesinato selectivo y despiadado de líderes políticos y sociales, dentro de un sangriento conflicto armado iniciado en 1936 con el masivo asesinato de obreros campesinos de las plantaciones bananeras estadounidenses en la norteña Urabá.

Las siete bases gringas instaladas en Colombia, están en pleno apogeo acopladas a los planes ofensivos del Comando Sur de EEUU contra Venezuela. La "Operación Libertad" está en marcha, nos amenaza a todos, independientemente de nuestros credos, ubicaciones ideológicas o condiciones sociales. Sería un holocausto, sin exageraciones.

Ante esa terrible posibilidad, viene a nuestro encuentro la sabiduría de Mahatma Gandhi:
"No hay camino a la paz, la paz el camino".

Comunidad internacional alerta
La inmensa mayoría de la comunidad internacional, afortunadamente, está firme en la defensa de la paz en Venezuela y contra la invasión militar de nuestra patria soberana e independiente. Incluso la mayoría de los casi cincuenta países que desconocen al presidente Nicolás Maduro y reconocen al autojuramentado diputado Juan Guaidó, se ha manifestado contra la guerra y la intervención militar. Ello constituye una magnífica señal, por encima de las manipulaciones que enfrentan espíritus atizados también por los múltiples impactos de la tragedia histórica que sufrimos en Venezuela.
En este ámbito es útil resaltar variables internacionales escondidas en la borrasca informativa:

-La Organización de Estados Americanos (OEA) no ha aprobado ninguna resolución condenatoria del gobierno del presidente Nicolás Maduro ni alguna que reconozca a Juan Guaidó como supuesto "encargado de la presidencia". Como lo ha hecho notar oficialmente la Comunidad de Naciones del Caribe (Caricom), el secretario general de la OEA, Luis Almagro, ha venido actuando desafortunadamente, irrespetando tanto modos diplomáticos como pautas del Derecho Internacional Público. 

-En el ámbito de la Organización de la Naciones Unidas (ONU), tampoco el Consejo de Seguridad ha tomado acuerdo alguno sobre Venezuela. Y sobre cualquier votación adversa a la paz y la integridad territorial  de nuestro país, será vetada activamente por China y Rusia, como sus respectivos gobiernos lo han anunciado.

-De las cinco potencias emergentes integrantes del grupo BRICS, con excepción de Brasil, cuatro respaldan al gobierno venezolano: Rusia, India, China y Suráfrica.

-En la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que actualmente preside Venezuela, PDVSA tiene asegurados suministros para la refinación de hidrocarburos y mercados para sus exportaciones de crudos.

-El Movimiento de Países No Alineados (NOAL) muy mayoritariamente respaldan al gobierno de Maduro.

-En cuanto a la Secretaría General de la ONU y la presidencia de su Asamblea General, ambos titulares han manifestado no sólo el reconocimiento institucional al gobierno venezolano sino su disposición para estimular el diálogo entre venezolanos y la búsqueda de acuerdos y soluciones en paz, sin injerencias hostiles y mucho menos armadas, como tantas veces han amenazado el presidente Donald Trump y sus más representativos secretario de defensa, Estado y Seguridad Nacional.

Todo esto lo refiero no para minimizar la fuerte alineación encabezada por Trump y Álvaro Uribe Vélez, integrada por el Grupo de Lima (menos México) y la mayoría de países europeos, sino con el objetivo de exponer las fortalezas internacionales reales del gobierno de Maduro, que mueve sus piezas para enfrentar tanto esa adversidad política -también muy real y hostil- como el bloqueo financiero, económico y petrolero impuesto por Trump con pretensiones mundiales, que no le han funcionado totalmente, como imaginaban él y sus belicosos asesores.

La fase extorsiva Brownfield
El ex embajador estadounidense en Caracas y Bogotá, William Brownfield, anunció lo que a su juicio su gobierno debía hacer con Venezuela:

“Si vamos a sancionar a Pdvsa tendrá un impacto al pueblo entero, al ciudadano común y corriente de las comunidades de Venezuela... En este momento quizás la mejor solución sería acelerar el colapso, aunque produzca un periodo de sufrimiento mayor, por un periodo de meses o quizás años“.

Eso lo espetó el diplomático gringo sin arrepentimiento ni miramientos. Es lo que un grupo desequilibrado de venezolanos extremistas han procurado y gestionado servilmente, y está aplicando Trump con su asfixia extorsiva financiera contra la sociedad venezolana. 


El prontuario de EEUU

Un factor internacional de primerísima importancia que viene actuando en la actual crisis política venezolana es el poder injerencista de EEUU. Quien obvie la potencia y las habilidades de este factotum de la política mundial y especialmente de la política, los negocios, los modos de vida y la dinámica comunicacional en América Latina y el Caribe, simplemente es un despistado o hace gala de un cinismo proverbial: lo primero evita aciertos en política, por errores de comprensión; y lo segundo desvela los grados de complicidad.

El prontuario de EEUU en golpes de estado, invasiones, guerras y despojos territoriales y económicos en asociación con las oligarquías corruptas y serviles en nuestra región, no sólo es protuberante desde el siglo XIX sino multiforme en escala sinfónica, desde La Florida, México, Puerto Rico, Cuba. Dominicana, Haití, Grenada, Panamá y el resto de Centroamérica hasta el enorme espacio suramericano: 

"Tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos", dijo Poririo Díaz describiendo el ímpetu expansionista de la que iba a posicionarse después de la Segunda Guerra Mundial (1945) como primera potencia del imperio capitalista en cerrado duelo con la Unión Soviética, principal potencia de la esfera comunista internacional, que se vino abajo finalmente en el trienio 1989-1991.

Venezuela en el ojo del huracán 

EEUU se ha involucrado en los acontecimientos traumáticos de la política venezolana en las dos décadas signadas por la saga Chávez-Maduro (1999-2019), desde el golpe de estado de abril de 2002 y el paro petrolero-empresarial de 2002-2003 hasta las amenazas de invasión por el Comando Sur, hoy con riesgo cierto de ejecución en grado de holocausto. Y no es exageración.  

Sin embargo, aunque parezca contradictorio, el diseño mismo de este plan injerencista estadounidense lleva en él su principal antídoto: un nivel de cipayismo jamás visto tan descarada y servilmente en América Latina y el Caribe. 

En verdad, el cipayismo del que hacen gala quienes han procurado la desbocada intervención del gobierno de Donald Trump, no solo es vergonzosa sino de antología.

Las debilidades del plan Trump

Pero también -es cuestión de tiempo- el agresivo plan Trump contra la soberanía y la integridad territorial de Venezuela tiene dos fallas esenciales:

1.- Las debilidades intrínsecas de Trump, un presidente minoritario y desaforado.

2.- La estrecha alianza de EEUU con la oligarquía mafiosa colombiana, ejecutante y garante de los más aborrecibles crímenes, desde el narcotráfico de mayor calado internacional hasta el asesinato selectivo y persistente de líderes sociales y políticos durante los últimos ochenta y tres años, contados a partir de 1936 y no, como es usual, desde aquel 9 de abril de 1948, cuando asesinaron en Bogotá a Jorge Eliécer Gaitán. Su máximo exponente hoy, es Álvaro Uribe Vélez, jefe real de la "parapolítica", práctica criminal y sanguinaria, inhumana, de coacción, amedrentamiento, desplazamiento forzado de millones de colombianos en su propio territorio, despojo de tierras y cultivos a los campesinos, todo en alianza con las tenebrosas bandas paramilitares y narcotraficantes.

Trump como problema 

Donald Trump es un presidente atípico. Su ignorancia es protuberante, tanto como su brutalidad, es uno de los mandatarios más básicos que haya tenido EEUU. Carece de brillo estratégico, lo que trata de ocultar con sus espasmódicos lances intimidatorio, vulgares en el plano internacional.

Esto lo ha llevado a desquiciar la política exterior estadounidense, lo que ya impacta mucho y resumo en una pregunta que se harán y comentarán en privado muchos líderes mundiales:
-Hasta cuándo Trump?

Esa interrogante está instalada en la sociedad estadounidense con gran preocupación, legítima, por lo demás, porque desde el exterior rebotan hacia Washington peticiones de morigeración y control que comienzan a tomar en serio el Congreso de EEUU.

Trump es un presidente minoritario. Nunca ha sido acompañado por la mayoría del pueblo estadounidense. De hecho, obtuvo 2,7 millones de votos menos que Hillary Clinton en 2016, y solo accedió a la presidencia por el sistema de segundo grado establecido en la constitución mediante "colegios electorales". Y eso pesa: ese caballero jamás hubiese sido presidente de EEUU por voto popular directo.

Su talante de agresivo jugador en los negocios privados, lo ha llevado a cometer tantos errores en tan poco tiempo -apenas dos años-, que varios de sus principales secretarios (ministros) han salido despavoridos de las carteras de Defensa, Seguridad Nacional y Estado (cancillería). Ha abierto o degradado tantos frentes de conflictos internacionales, que :mantiene encendidas demasiadas alarmas sin haber aplacado ni uno sólo de esos problemas.

El caos Trump

No parece exagerado denominar estos dos años de gestión en la Casa Blanca, como "el caos Trump", sin direccionalidad definida ni logros tangibles: todo parece haber empeorado, desde las relaciones con China y Rusia, pasando por Siria, Afganistán e Irán, hasta los complejos temas de comercio internacional. 

Trump puede ser víctima de su propio "caos": mientras aparecen excéntricos gobernantes autoproclamados "seguidores" de Trump en América Latina, como en Brasil y El Salvador (nunca faltan), en Estados Unidos de América (EUA, que así es como se llama ese país, USA en inglés) se le vienen complicando las cosas.

En diciembre pasado, el Partido Republicano perdió la mayoría en la Cámara de Representantes, dejando al desnudo el declive de su "presidente minoritario". A mitad de su periodo de cuatro años, Trump luce entrampado en su propio laberinto, pudiéramos decir que sin mucho futuro y con serias complicaciones, casi irresolubles, como la pesadilla del flujo ilegal de emigrantes latinocaribeños por la frontera sur y el muro de contención de cara al descompuesto México heredado por Andrés Manuel López Obrador (AMLO), quien además vino a estropear severamente la solidez del Grupo de Lima, principal macana de Washington contra el gobierno de Nicolás Maduro. 

Así las cosas, el gobernante estadounidense camina al desespero, ahora maniatado por el Congreso, cuya mayoría -incluso en términos bipartidistas- ya muestra signos de agobio ante el "caos Trump" y va tejiendo las amarras: en materia presupuestaria provocó el cierre temporal del gobierno en áreas no indispensables; prohibió el uso de la fuerza militar en el conflictivo caso Venezuela; y más recientemente, la Cámara de Representantes le abrió una investigación al presidente por haber declarado "emergencia nacional" con el deliberado propósito de utilizar fondos del Pentágono para burlar los límites presupuestarios impuestos por el Congreso a la construcción del muro en la frontera con México. Mayor caos, imposible.

La guerra que "necesita ganar"

La situación descrita pudiera aminorar los riesgos de holocausto en Venezuela mediante una invasión militar colombo-gringa. Sin embargo, pudiera ser lo contrario: Donald Trump dijo durante su campaña electoral de 2016, que EEUU "necesita ganar una guerra", vistos los empantanamientos, derrotas y verdaderos genocidios cometidos por sus tropas y aliados en Vietnam, Afganistán, Libia, Irak y Siria, entre otros desastres. Pero ahora es Trump el que "necesita ganar una guerra" para salvar el pellejo y tratar de intentar la reelección en 2020, a la vuelta de la esquina. "Tratar de intentar" digo, porque no le será fácil escapar de un juicio político que termine echándolo de la Casa Blanca, tesis muy manoseada desde su triunfo en los colegios electorales, ya por los supuestos -y aún no comprobados- nexos de su campaña con el gobierno ruso, ora por sus confrontaciones recurrentes con el Congreso. 

La desgracia venezolana 

Nada de lo anterior constituye respaldo al errático gobierno de Nicolás Maduro, pero sí abona el camino de la paz en Venezuela. Conjurar el riesgo de invasión es prioritario.

"El gobierno de Maduro está muerto históricamente", escribí en 2018, sentencia plenamente vigente por la naturaleza misma de la gestión autoritaria, corrupta, arbitraria e ineficiente de la gestión Chávez-Maduro (1999-2019). 

La desgracia venezolana actual, verdadera tragedia histórica, radica en que "no sabemos quién es peor, si el gobierno o la oposición", vox populi.

El camino de la paz incluye necesariamente un diagnóstico acertado de la realidad nacional, fuera del guión impuesto por la diabólica y cínica contienda extremista chavismo-antichavismo. 

Una guerra, gestada por intereses muy bastardos, tanto nacionales como extranjeros -comenzando por los de la oligarquía mafiosa colombiana y los de los factores neocoloniales de Guyana- vendría a complicarlo todo: se agravarían todos nuestros problemas, habría pérdida masiva de vidas humanas y destrucción de la infraestructura nacional, ciudades y poblaciones menores. Sería un holocausto que conscientemente buscan quienes sueñan con una Venezuela desvencijada y hasta desintegrada.



jueves, 14 de febrero de 2019

"La Plataforma por el Referendo Consultivo no reconoce a Guaidó como presidente": Manuel Isidro Molina para laiguana.tv

“Rechazamos firmemente las pretensiones de invasión de Estados Unidos y Colombia. Si vienen, nos verán del lado patriota”, dice el periodista Manuel Isidro Molina, a pesar de ser un severo y pertinaz crítico del gobierno bolivariano, al punto de calificar la situación actual del país como una tragedia histórica. Foto: laiguana.tv

Por Clodovaldo Hernández / LaIguana.TV

Molina conversó con LaIguana.TV a propósito de que la organización política en la que milita, el Movimiento Popular Alternativo (MPA), es parte de la Plataforma Pro Referendo Consultivo, que ha propuesto una consulta nacional sobre la eventual realización de nuevas elecciones para la presidencia de la República y para la Asamblea Nacional, como salida a la actual coyuntura nacional.

El entrevistado no estuvo entre los promotores del referendo que se reunieron con Juan Guaidó, un cónclave que desató grandes polvaredas, pues se dijo que los exministros del comandante Chávez habían reconocido al diputado como presidente encargado. Molina sí participó, en cambio, en un encuentro interno que tuvieron los integrantes de esta plataforma para aclarar las dudas que se levantaron. Con esa información, asegura que ni los exministros ni los restantes integrantes de la alianza pro consulta han avalado al parlamentario autoproclamado.

A continuación, una versión del diálogo sostenido por Molina con el periodista Clodovaldo Hernández:

-La propuesta de referendo se presentó en una rueda de prensa, pero a los pocos días se vio algo enturbiada porque una parte de sus promotores, los que se identifican como exministros del gobierno de Hugo Chávez, se reunieron con Juan Guaidó. No te vi en esa reunión… ¿No te invitaron o te invitaron y no quisiste ir?

-No fui porque en realidad no fue una entrevista de la Plataforma por el Referendo Consultivo, sino que había sido solicitada el 17 de enero, antes de la autojuramentación de Guaidó como encargado de la presidencia, pretensión que nosotros no reconocemos. Ellos fueron a nombre de la Plataforma de Defensa de la Constitución, que es el equipo que comenzó a plantear la posibilidad del referendo. Ellos fueron a la Asamblea Nacional a reunirse con el presidente de ese órgano, no con el Juan Guaidó que se atribuye la presidencia de la República porque, repito, no lo reconocemos como tal. No lo reconocen ellos (los exministros) ni mucho menos el resto de los miembros de la Plataforma por el Referendo. Claro, como ese es un centro de expresión política, y además, de manipulación política, se tomó como que los exministros de Chávez iban a avalar la condición de presidente encargado de Guaidó, que no reconocemos en la Plataforma. Además hubo unas declaraciones un poco fuera de contexto, que no expresan la política común. Eso lo analizamos en una reunión al día siguiente…

-¿Esas fueron las declaraciones de Héctor Navarro?

-Sí, las de Héctor Navarro… Algunos pensábamos que esa reunión (con Guaidó) ha podido aplazarse hasta después de la Conferencia de Uruguay, para no entrar en el toma y dame gobierno-oposición o Presidencia de la República-Asamblea Nacional, sino más bien dejar que bajaran las aguas.

Molina, analista político de larga trayectoria, valoró positivamente lo ocurrido en Montevideo, donde hubo dos reuniones paralelas sobre Venezuela. Indicó que quedó claro que la Unión Europea no reconoce a Guaidó como organismo multinacional porque no hay unanimidad debido a las posturas de países como Grecia y Turquía (que apoyan a Maduro) y la de Italia que dice que si no se reconoce a Maduro, cuya autoridad procede de unas elecciones, menos puede reconocerse a alguien que no fue electo.

Estamos del lado patriota

-Mucha gente no tiene claro que el resultado de Uruguay fue positivo –continuó- , pero creemos que sí lo fue porque estos actores entraron en la escena internacional y aplacaron un poco la pretensión invasora de EEUU, que rechazamos firmemente porque somos defensores de la paz y estamos en contra de la invasión norteamericana y colombiana que está montada. Consideramos que esto conduciría a un holocausto porque sabemos de la preparación de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, de la Milicia y de las organizaciones cívico-militares que van a enfrentar esa invasión. En mi caso y el del Movimiento Popular Alternativo, nos verán del lado patriota, confrontando en la medida de nuestras posibilidades a los invasores, independientemente de las críticas que le tenemos al gobierno, y de que consideramos que vivimos una tragedia histórica. Claro que no culpamos de eso exclusivamente al presidente Maduro porque a él lo han demonizado, estigmatizado, menospreciado, subvalorado como parte de un plan consistente del Comando Sur que requiere un presidente descalificado para poder arrasar al país. Eso es parte de la preparación comunicacional y psicológica de la guerra. En esto pesa la locura de Donald Trump, que es un tipo desequilibrado, fascista en el fondo, que ha dicho que EEUU necesita ganar una guerra. Además, él necesita ganar una guerra porque resulta que es un presidente minoritario que perdió las elecciones con 2 millones 700 mil votos menos que Hillary Clinton, pero resultó presidente por el sistema de colegios electorales que rige allá. Por otro lado, perdió la Cámara de Representantes, tiene control del Senado apenas por un tilín, y está en un promedio de 35% de popularidad. Entonces quiere ganar una guerra, así sea a través de un holocausto sobre nuestra patria, con masiva destrucción y asesinato de decenas de miles de venezolanos y venezolanas, todo eso para elevar su posición en las encuestas y asegurarse la reelección. Es algo criminal que nosotros rechazamos y no nos explicamos cómo es que hay venezolanos que han sido convencidos de las “bondades” de una invasión, que creen que es un videojuego.

-Ustedes proponen un referendo para que el pueblo diga si quiere nuevas elecciones presidenciales y adelantar las de la AN, pero con un nuevo Consejo Nacional Electoral. El problema es ¿cómo se elegirían los miembros de ese nuevo CNE?

-Hemos dicho que con este CNE, que no genera confianza mayoritaria en el país, no debe hacer ningún referendo que solucione la parte política de la tragedia nacional que vivimos. Proponemos una renovación del CNE mediante un acuerdo de interés nacional, que no es un acuerdo de cúpulas. En esto puede ayudar mucho la intervención respetuosa de factores internacionales, como estos que se reunieron en Montevideo, como el papa Francisco y la iglesia Católica, que ya ha dicho que está esperando que Guaidó se lo pida por escrito, porque ya lo hizo el presidente Maduro. Estos cinco rectores tendrían que ser designados mediante acuerdo. Eso significa que el gobierno tendrá representación y la oposición también, pero no es que habrá un independiente progobierno y otro pro oposición, como hacían AD y Copei en sus tiempos. Si se hace así será una mascarada, se le verán las cuatro patas al caballo, será un nuevo engaño para el pueblo. Tenemos que ser más generosos con el país, darle señales de que hay capacidad para una nueva conducción de la política. Todos tenemos que meterle el hombro a Venezuela.

-Esa falta de confianza en el CNE es un hecho de naturaleza netamente política porque tanto Guaidó y todos los miembros de la AN, como el presidente Maduro han sido proclamados en sus cargos por ese CNE.

-Por supuesto, pero es tal la tensión que ha habido que ninguno se reconoce. El gobierno solo reconoce a Guidó como diputado, ni siquiera como presidente de la AN porque basándose en la sentencia del Tribunal Supremo, la AN está en desacato y no tiene directiva actual. El único presidente que reconocen es a Henry Ramos Allup. Esa es una parte de la crisis. Pues bien, como no nos reconocemos los unos a los otros, que hable el pueblo. Ese es el fundamento del referendo, que se exprese el soberano. Proponemos que se pregunte: “¿Está de acuerdo usted con convocar elecciones para la renovación de los poderes públicos?”, entendiendo que se trata de presidencia de la República y Asamblea Nacional. Cuando se le dice al oficialismo que se podría elegir al presidente si el pueblo lo aprueba, brincan y dicen que no, que Maduro tiene mandato hasta el 2025. Cuando se le dice a los diputados que podrían adelantarse las elecciones de la AN, pasa lo mismo: dicen que esas elecciones son en 2020.

Explicó el entrevistado que ya le han entregado o va a entregar su propuesta a varios de los actores internacionales que se han interesado en ayudar a resolver la crisis venezolana, como los gobiernos de México y Uruguay, el Caricom, la UE, la ONU y el Parlatino. “Son mecanismos de intervención respetuosa de la soberanía que no están acoplados a los intereses de cada bando. Nosotros debemos decirles que hay venezolanos a favor de una gestión de ellos”.

-¿Los acoplados serían la OEA y Unasur?

-Bueno, yo creo que hay un problema con la OEA: ella, como tal, no ha tomado ninguna decisión sobre Venezuela ni contra el presidente Maduro. Decir eso es un atrevimiento de Luis Almagro, que ya se lo reclamó el Caricom con mucha razón. Almagro no está facultado para hablar contra el gobierno de Venezuela porque ninguna votación en el seno de la OEA ha alcanzado los 24 votos necesarios para que sea un mandato. Los secretarios generales de los organismos multilaterales expresan los acuerdos no los desacuerdos ni mucho menos toman partido por una parte, que es lo que está haciendo Almagro, totalmente desaforado. De hecho, cuando EEUU, Almagro y el Grupo de Lima convocan a una reunión el jueves de la semana antepasada para reconocer a Guaidó, de 19 votos que tenían, bajó a 16, pero aún así Almagro tiene el atrevimiento de desconocer a Maduro y decir que la OEA va a sancionar a Venezuela. Lo de Almagro es un caso psiquiátrico, está haciendo un rol de cipayo, y eso es bastante antipático para cualquiera que sea patriota, latinoamericanista, con sentido de la propuesta histórica de Bolívar como la unión de las excolonias de Europa frente al panamericanismo monroista. Yo cuando veo la actuación de Almagro, siento pena ajena, como ciudadano, como periodista, como político. Es insultante.

Molina recalca que la UE no ha respaldado tampoco a Guaidó, como pretenden hacerlo creer algunos dirigentes y analistas. “Por eso es que la secretaria de Relaciones Internacionales de la UE encabeza el grupo de contacto en Montevideo y dice que se oponen a una invasión. Lo dice la UE, de manera que la nuez de los aplaudidores y procuradores de la invasión es sumamente pequeña. Esta es una política de Trump, no de Guaidó o de Julio Borges o de María Corina Machado, Leopoldo López o Ledezma”.

-El gobierno ha dicho, al menos declarativamente, que está dispuesto al diálogo y la negociación, pero el otro bando no parece querer esa salida…

-No, lo que quieren es claudicación, pero así no se negocia. Las posiciones extremas son esas: no queremos otra elección de presidente, no queremos adelantar la elección de la AN. Pero, además, hay sectores de la oposición que te dicen que “no aceptamos referendo si Maduro sigue en Miraflores”. Entonces, nosotros les respondemos: “Bueno, sáquenlo”… Es una insensatez…

-¿Cuál fue la posición de Juan Guaidó sobre la propuesta de referendo que le hicieron los exministros?

-Él, más que todo, oyó, según la información que nos dieron los asistentes a la reunión, que fueron los exministros y el profesor Edgardo Lander. Guaidó escuchó y dijo que lo iban a analizar. Luego nosotros hemos solicitado a través de amigos una entrevista con el presidente Maduro para hacerle una presentación de la propuesta. Ojalá nos reciba. No hemos tenido respuesta (el viernes 8 de febrero). Vamos a tener una reunión con el rector del CNE (Luis Emilio Rondón) con ánimo informativo. Vamos a hacer el planteamiento formal al directorio del CNE porque tenemos la disposición a que se aplique plenamente la Constitución y la Ley de Referendos. Vamos a solicitar todo legalmente, según las exigencias del CNE, independientemente de que en el camino, este organismo se cambie. Haremos una campaña nacional de recolección de firmas con la veeduría de la CNE, para que tenga fuerza de ley. Estamos convencidos de que el referendo tiene sentido si es vinculante. Cuando habla el soberano está por encima del presidente de la República, de la AN y hasta de la Asamblea Nacional Constituyente. Si esto se materializa, con el apoyo internacional, con la preservación de la paz, oponiéndonos a la guerra, rechazando firmemente la invasión, haciendo más política que verborrea descalificatoria, aspiramos a que ese referendo sea tomado como una participación masiva y decisoria del soberano en la solución al componente político de esta tragedia histórica. Es un mecanismo al que hemos llamado “Camino de la paz”. No nos gusta el término de hoja de ruta porque ya está muy manoseado internacionalmente, creemos en el principio de Gandhi de que no hay camino a la paz, sino que la paz es el camino.

Enjambre comunicacional contaminado

-En tu condición de periodista y analista político, ¿cómo evalúas la actuación que han tenido en esta etapa del conflicto venezolano los medios de comunicación, sobre todo los internacionales y este actor reciente de la comunicación que son las redes sociales?

-Viendo esto desde la teoría de la comunicación, estamos en una nueva etapa, más allá de la aldea global de (Marshall) McLuhan. Vivimos, sufrimos, estamos inmersos en lo que yo vengo llamando un enjambre comunicacional. En los estudios básicos nuestros había un emisor, un mensaje un receptor… pero ahora no se sabe dónde comienza ni donde termina la comunicación. Es un enjambre comunicacional altamente contaminado que, incluso, pasa por los servicios de inteligencia, los intereses empresariales, financieros, políticos, partidistas, sociales, institucionales. Eso ocurre a escala global, pero de ello no escapa Venezuela. Tenemos una dinámica comunicacional contaminada, manipulada. En las redes sociales hay unas expresiones realmente lamentables, muy pobres, donde anidan el odio, el desprecio, la descalificación, la desconsideración de los oponentes por motivos de raza, por niveles sociales. El sistema comunicacional dominado por el gobierno, por el Estado, está censurado, es manipulado, es unidireccional, presenta solo la cara que le interesa al gobierno de una manera muy extrema. En medios del gobierno nunca ves una entrevista sensata a un opositor o a un independiente como uno, que no esté aferrado a ninguno de los criterios de la polarización. Desatan campañas terribles de estigmatización y descalificación. Pero eso que se ve en el bando comunicacional del gobierno también se ve en los bandos comunicacionales de la oposición. Incluso hay casos extremos que evidencian cómo incide esta loca dinámica de las redes desde EEUU, desde Colombia, desde laboratorios terribles, el Comando Sur, la CIA, el Pentágono. Esto se observa en la forma cómo EEUU y los vendepatria que están solicitando una invasión militar han ido prácticamente logrando que una porción de venezolanos acepten como benigna esa opción. Esto es parte de la guerra, no es parte de la política. Es la política por otros medios ya, para citar a Clausewitz. Estamos en una complicación mediática que va desde la política hasta la guerra. Hay racismo, menosprecio étnico, social y político: el ser chavista es ser bruto, ignorante, inválido desde el punto de vista humano… algo inaceptable.

Agrega que es preocupante que en el debate sobre los medios de comunicación han desaparecido voces tan importantes como la de la un sector de la Iglesia católica, que se preocupaba por los contenidos. “Hace mucho tiempo que no oigo a nadie de la Iglesia hablar de eso, a pesar de que es terrible lo que nos está pasando. Pocos factores en esta contienda se preocupan por la ética en el desempeño comunicacional, que ya no se refiere solo a nuestros colegas periodistas, sino también a los productores independientes de radio y televisión y a los analistas de opinión en la prensa escrita y telemática. Ese debería ser una parte de la discusión porque cuando decimos que vamos a comenzar el camino de la paz con un referendo, más allá están los asuntos de fondo. ¿Nos vamos a empeñar o no en un reconstrucción moral de la República, que debe abarcar la política, el desempeño económico, el ejercicio de la función pública?”.

-Yo no puedo aceptar fríamente la idea de que los propietarios de medios privados y los que desempeñan cargos de jefatura en ellos se pueden lavar las manos y decir que la culpa de todo la tiene el gobierno –finaliza Molina-. Algunos se atreven a decir que la culpa la tienen el gobierno y “los políticos”, como si ellos mismos no hubiesen tenido incidencia… Ellos han sido parte de este desastre nacional. Finalmente debemos hacer un llamado a las Escuelas de Comunicación Social, a los investigadores, a los propios colegas en ejercicio. Todos tenemos derecho a asumir posiciones políticas, a tener militancia. Yo he sido militante desde muy joven. Pero vamos a hacerlo de una manera generosa con el país, vamos a respetarnos, a polemizar sobre el fondo y vamos a aportar para la mejora del país.

VER VIDEO COMPLETO DE LA ENTREVISTA EN:
https://www.laiguana.tv/articulos/431653-manuel-isidro-molina-clodovaldo-entrevista/

lunes, 11 de febrero de 2019

Estoy del lado de la paz, contra la invasión


El gobierno merece todas las críticas por sus fracasos, abusos y pillerías. Las he levantado con fuerza durante 18 años, desde 2000, sin tregua y a riesgo.

Igual he denunciado las tropelías de violencia y corrupción de unos opositores irresponsables que ahora decidieron actuar abiertamente como títeres de EEUU y del uribismo colombiano: 

ese no es el camino, al menos para luchadores de toda la vida, como nosotros.

Siempre chantajean, de uno y otro bando: a los dos he enfrentado y a ambos enfrentaré  porque son corresponsables de esta tragedia histórica.


No es la primera vez que amigos me reclaman. Y seguramente, tienen sus razones. Yo tengo las mías. Las he tenido desde que enfrenté al autoritarismo de Chávez y la inmunda corrupción de su gobierno, temprano desde 1999 mismo, lo que me llevó a retirarme del Polo Patriótico en agosto del 2000.

Sin embargo, nunca me han visto en el crónico bando del golpismo dominado por las fuerzas nacionales y extranjeras del neoliberalismo y el pro imperialismo, que desde 2002 no ha dejado de embestir en forma de golpe de estado, paro petrolero-empresarial, guarimbas de todo tipo y ahora con el peor esquema vendepatria de la invasión "humanitaria" y el cerco extorsivo económico, financiero y petrolero orquestado, ordenado e impuesto por Trump, el jefe de la patota, que amenaza a nuestra patria con un holocausto como ya las tropas genocidas de EEUU lo han hecho en Vietnam, República Dominicana, Grenada, Panamá, Irak, Libia, Siria y Afganistán.

Sus gobiernos han ensayado golpes incruentos como en Paraguay, Honduras y Brasil, recientemente; o  espantosamente brutales y genocidas como en Chile, Argentina, Uruguay y Brasil, y han sostenido dictaduras como las de Batista en Cuba, y Strossner en Paraguay.

La brutal historia genocida de EEUU es mucho más larga y sanguinaria, simplemente pasmosa como en Japón con los bombardeos nucleares de Hiroshima y Nagasaki, precedidos de bombardeos espantosos sobre decenas de ciudades japonesas calcinadas con ataques saturantes sobre poblaciones civiles inermes. Eso es EEUU en su "otra cara", la que no ven los gozosos  amantes de la "american way  of life": 
¡Te sometes o te calcino!


Guaidó no es más que un títere de Trump, y un Cámpora de Leopoldo López. Vive una fantasía de poder, que le puede salir demasiado perniciosa a la República y a nuestro pueblo, víctima de la irracional confrontación chavismo-antichavismo.

Por eso estoy del lado de la paz, contra la invasión colombo-gringa, el guión del Comando Sur de EEUU (descaradamente público y prepotente). Por lo mismo, estoy en contra de sus agentes títeres como Borges, Guaidó, Machado, Arria y Ledezma, que sueñan asir el poder engañando a un pueblo también maltratado por los fracasos, los abusos y las pillerías del gobierno Chavez-Maduro, que en la etapa actual "está muerto históricamente", como he dicho tantas veces desde hace más de un año.

No me inviten a enfrentar las torceduras y perjuicios del gobierno Chavez-Maduro, porque todo ello lo he enfrentado pacientemente desde 2000, sin caer en las tentaciones del neoliberalismo pro imperialista.

Hoy sostengo una posición de fondo y bien sustentada con una trayectoria a la luz del sol, por encima de incomprensiones, menosprecios y canalladas. Siempre he respondido: "Cada ladrón juzga por su condición".

Claro que no es fácil. No ha sido fácil, y tampoco lo será. Pero lo único justo, necesario y posible es persistir para superar esta tragedia histórica, sobre el desgaste simultáneo de ambos bandos fracasados y corresponsables del sufrimiento de nuestro pueblo y del desastre que vive nuestra patria, Venezuela, el país más saqueado y descapitalizado del mundo.

Manuel Isidro Molina🌹
11.02.2019

@manuelisidro21
manuelisidro21@gmail.com
manuelisidroxxi.blogspot.com
https://bit.ly/2NMQq17

viernes, 1 de febrero de 2019

EVITEMOS LA GUERRA / Referendo consultivo con nuevo CNE para relegitimar los Poderes Públicos


Documento presentado en rueda de prensa en Caracas, viernes 01 de febrero de 2019.


Ante la tragedia histórica que sufrimos en la Patria, quienes suscribimos el presente documento nos dirigimos al país a los fines de expresar lo siguiente:

1. Más allá de los argumentos constitucionales y legales acerca de los actos políticos que han tenido lugar con el ejercicio del Poder Ejecutivo, ellos revelan la profundidad de la crisis política, económica y social y de la fractura nacional que padecemos los venezolanos.

Hoy pretenden disputarse la legitimidad del poder dos actores polarizados bajo el imaginario del "doble poder": dos TSJ, dos parlamentos, dos fiscales, y ahora dos presidentes que se acusan recíprocamente de "usurpadores".

Sólo faltaría que dos ejércitos decidan enfrentarse con las consecuencias y responsabilidades que eso puede tener en términos de vidas y de destrucción del país.

Nosotros apostamos a la unidad de la nación, a su integridad territorial y al reconocimiento del pluralismo político en su diversidad y convivencia democrática, tal como está claramente establecido en el Título I sobre Principios fundamentales de nuestra Constitución.

2. Alertamos en particular al gobierno pero también a algunos sectores extremistas de la oposición, que animar la confrontación en búsqueda de una mítica "batalla final" que nunca lo es, significa jugar con fuego sobre la vida de nuestro pueblo, literalmente.

Propiciar la caotización de la República nunca tendría buenos resultados. Los peligros son varios: más violencia, guerra civil, la disolución del Estado-nación como comunidad política o la eventualidad de una intervención militar extranjera que rechazamos enérgicamente desde nuestra postura patriótica.

Nos parece una irresponsabilidad del gobierno y de la mayoría de quienes integran la AN, no actuar para evitar, mediante el diálogo y la negociación, sino para propiciar una confrontación que ellos saben al final se saldaría en muertes, destrucción y pérdida de nuestra soberanía y dignidad como pueblo.

3. Nunca como ahora tiene pertinencia la práctica por el encuentro, el diálogo, la negociación y el acuerdo. Nunca como ahora se requiere respetar los derechos democráticos del pueblo.

No bastan las declaraciones ni los llamamientos retóricos. El alto gobierno está obligado a dar testimonios reales de que está dispuesto a explorar acuerdos aceptables para todos, que contribuyan  a lograr la convivencia democrática del país.

Exigimos que se produzca la inmediata restitución del régimen de libertades y garantías establecidas en la Constitución, la libertad de todos los presos políticos no incursos en delitos de lesa humanidad y graves violaciones a los derechos humanos, la rehabilitación de organizaciones políticas y de sus voceros, el cese a la intimidación y la represión masiva y selectiva a los dirigentes de las comunidades que protestan y el respeto al ejercicio pleno de sus derechos constitucionales.

4. Reconocemos y alentamos a todos los países y organizaciones multilaterales dispuestos a facilitar, acompañar y garantizar un proceso de diálogo y negociación en Venezuela, como una salida electoral y pacífica al conflicto interno, con transparencia y garantías.

Pedimos en particular la mediación del Secretario General de la ONU, del Parlalento Latinoamericano y del Caribe (Parlatino), de los presidentes de Uruguay y de México, y requerimos así mismo los buenos oficios del Papa Francisco y del Vaticano. 

A todos ellos nos queremos dirigir públicamente, agradecer su disposición como mediadores y solicitarles que sigan insistiendo en esa propuesta, que pueda jugar un papel fundamental para facilitar un proceso de negociación sustentado en un dialogo social en Venezuela y la búsqueda de una salida electoral para evitar la guerra, todo en favor de los derechos constitucionales y en función de la paz.

5. La Fuerza Armada Nacional Bolivariana tiene mucho que decir y hacer para evitar y repeler cualquier intervención militar extranjera; también a ella le corresponde actuar en el marco constitucional para evitar una guerra civil que podría significar miles de muertes, destrucción y perdida de la soberanía.

La FANB puede y debe jugar un papel fundamental en la búsqueda de una salida a la crisis en el marco de la Constitución y del ejercicio de la autodeterminación del pueblo venezolano  a través del diálogo y la conciliación, para evitar la guerra y garantizar la soberanía de la Nación, sin apartarse de su compromiso de no arremeter contra su propio pueblo. 

6. Exigimos una tregua inmediata del conflicto agudizado desde el 23E para lo cual proponemos:

a) Conformar ya un contacto entre el alto gobierno y la AN.

b) Y, dentro de condiciones para un pacto de gobernabilidad (como la designación de un CNE por consenso de interés nacional), convocar un referendo consultivo (procedimiento democrático y participativo presente en la Constitución y mucho más expedito que unas elecciones generales) con observación amplia y calificada de la ONU, que consulte al soberano, el pueblo, si está de acuerdo o no en la convocatoria de unas elecciones generales que permitan la relegitimación de los Poderes Públicos.

7. Nos constituimos en Plataforma por el Referendo Consultivo, abierta a todos los defensores de la paz, la soberanía y los derechos sociales, para concertar esfuerzos orientados a persuadir a todos los actores.

El referendo consultivo puede ser convocado mediante acuerdo incluso a la vez por el gobierno y por la AN. Por nuestra parte, impulsaremos un proceso de recolección de firmas, tal y como pauta la Constitución.

8.- Contactaremos a todos los partidos de oposición representados en la AN y debatiremos con ellos el mejor camino a seguir.

Contactaremos al gobierno, al PSUV y y a los demás partidos del Polo Patriótico con el mismo propósito.

9.- Contactaremos a actores internacionales diversos como las Naciones Unidas, la Unión Europea, y a los gobiernos de México y Uruguay. Saludamos con gran expectativa en defensa de la paz de nuestra patria, la Conferencia Internacional de Montevideo sobre la crisis en Venezuela convocada por los presidentes de México y Uruguay, la cual debe ser apoyada por el Parlamamento Latinoamericano y todas las corrientes religiosas y fuerzas sociales amantes de la paz.
10.- Proponemos la conformación de un amplio movimiento por la paz y la democratización nacional, para lo cual contactaremos a trabajadores y organizaciones sindicales y gremiales, movimientos sociales, organizaciones políticas, grupos de opinión e iglesias, y a todas aquellas organizaciones de la sociedad civil comprometidas con la paz.

Caracas, 1ro. de febrero de 2019

Firmamos:

° Enrique Ochoa Antich, dirigente político independiente 

* Gustavo Márquez Marín,  Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

° Gonzalo Gómez, Marea Socialista – Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

* Héctor Navarro, Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

° Manuel Isidro Molina,  Movimiento Popular Alternativo



° Juan Barreto, Redes - Plataforma Alternativa Bolivariana


* Santiago Arconada, Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

° Reinaldo Quijada, UPP89

* Edgardo Lander, Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

° Javier Biardeau, profesor de la Universidad Central de Venezuela (UCV)

* Oly Millán Campos, Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

° Héctor Sánchez, Redes – Plataforma Alternativa Bolivariana

* Ana Elisa Osorio, Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

° Manuel Sutherland, Centro de Investigación y Formación Obrera (CIFO)

* Douglas Aponte, Plataforma Popular LAS COMUNAS

° Juan García, Marea Socialista – Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

* Jaime Torres, Redes - Plataforma Alternativa Bolivariana 

° Alexander Marín, Nuevas Políticas

* Luis Mogollón, Plataforma Ciudadana en Defensa de la Constitución

° Suleika Matamoros, Marea Socialista

* José Vielma, Dirigente Zulia

° Horacio Silva, Dirigente Petrolero- Carabobo

* Jairo Colmenares, Sindicato Metro de Caracas

° William Chávez, Dirigente Caracas

* Juvenal Pantoja, Redes

° Oswaldo Flores, UPP89

* Luis Lovera, Redes

* Carlos Mejias -  Chavismo Bolivariano Carabobo



° Wilfredo Rojas, Redes

* Vladimir Aguilar Castro, profesor Titular de la Facultad de Ciencias Políticas y Jurídicas de la Universidad de los Andes (ULA)

* Nelin Escalante, periodista

(Siguen decenas de nuevas adhesiones  que serán publicadas por medios digitales y redes, abierto el documento a todos los sectores que deseen suscribirlo)

* Manuel Losada Marchena, Movimiento Poder Ciudadano (Aragua)

* Domingo Alberto Rangel, ingeniero, docente y articulista de prensa

* Blas Cuartín, ingeniero geólogo y profesor universitario


Por favor, difundir al máximo.


* Contactos para entrevistas de prensa y suscripción del documento: